VIAJE CULTURAL A SALAMANCA 22-11-2011
Alumnos de 3º y 4º ESO.
Abriéndose el sol un tanto perezoso entre las nubes, nos recibió la noble e ilustre ciudad de Salamanca. Los pináculos de sus torres, en especial los de la catedral, aparecieron majestuosos a nuestros ojos y sobre todo a los que deseaban corretear por las calles de esta villa, como si el tiempo se nos fuera a acabar en unos instantes.
Conforme a lo programado sobre las 10,40 comenzábamos nuestro itinerario a los pies del grandioso puente romano agradecido al preciado caudal del no menos importante río Tormes.
Primera curiosidad, el verraco ibérico del arte prerromano; segunda, nuestra calzada romana de la vía de la plata; tercera el comentario en una Web salmantina:
Aunque existe un puente nuevo construido a principios de siglo y para honor del construido 19 siglos antes, en él rezaba un cartel advirtiendo: «atención, vehículos de más de 18 Ton. por puente romano “
Subimos hacia la catedral vieja para vislumbrar desde su “torre del gallo”, una panorámica inigualable de Salamanca. Recorrido por sus tejados y torres nos hizo sentir el frío de las mañanas salmantinas. Contemplar las dos catedrales, desde el interior, por los corredores superiores, fue también una experiencia que nunca antes habían sentido.
En el interior de la catedral vieja, ya museo, y con nuestro cuestionario de saberes, datos y anécdotas sobre la ciudad, descubrimos el origen y fundación de la Universidad, que era “estar en capilla”, las muestras de su arte y un moderno capricho de la restauración sobre la fachada lateral: su astronauta.
La Casa de las Conchas se resistió un poco a dejarnos entrar. Aunque no se nos dan mal los libros, estábamos en la puerta la actual biblioteca pública, senos resistía la entrada, pues un grupo de pensionistas parecía perseguirnos por los senderos de estos edificios nobles.
La rana de la portada de la Universidad, también se resistió a algunos. No así la que algunos bautizaron como “¿esta es la pontificia? Si esta es la Clerecía o el Real colegio del Espíritu Santo de los Jesuitas que alberga la insigne Universidad Pontificia de Salamanca.
Sin embargo una pregunta flotaba en el amiente: ¿dónde está la calle Toro? Fuimos pos de ella, no sin antes deleitarnos un rato con la bonita plaza de Salamanca.
Aquí acabó nuestro primer recorrido, para tomar un picnic y continuar nuestra jornada vespertina de estudio, turismo y un poco de ocio por Salamanca.
Dijimos adiós a las iglesias y palacios y con no menos pena a sus calles y tiendas.
¡Hasta siempre y gracias Salamanca!
Departamento de Religión del IES Virgen de Guadalupe. Noviembre 2011.
ENLACE FOTOGRAFÍAS DEL VIAJE